En pocas semanas, millones de venezolanos perdieron el 75% de sus ingresos y terminaron entendiendo que la aparente luz que se abrió el año pasado se había apagado y no se prendería. Las protestas a nivel nacional indican que ya no se cree que el régimen sea capaz de mejorar las condiciones de vida de los venezolanos, ello representa un riesgo para el régimen. Esta situación aumenta el potencial que pudieran tener una elecciones primarias abiertas que elijan un liderazgo opositor que transmita confianza.  Esta posibilidad atemoriza a aquellos que detentan el poder, tanto en la oposición como en el régimen. También explica porqué el liderazgo opositor oficial las quiera evitar y esté trabajando para las elecciones presidenciales del 2030.  Los temas son “Las dudas asociadas a las primarias”, “La economía y las protestas” y “¿Qué busca la oposición oficial?”

Las dudas asociadas a las primarias

Ramón Muchacho (en La Ceiba) publicó una lista de argumentos y opiniones a favor y en contra, que se encuentran en la discusión pública que se está dando sobre las primarias. Aprovecho para hacer mis comentarios al respecto:

  • El reto logístico de organizar las primarias es gigantesco y se necesita ayuda del CNE. Ese es el camino fácil, el 16J se probó que la sociedad civil lo podía hacer sin el CNE, además es factible obtener recursos para ello y con auditoría incluida.
  • Sólo de la mano del CNE se pueden utilizar los 14 mil centros electorales en todo el país. ¿Acaso el CNE es el dueño de los centros? … también existen otros sitios.
  • “De todas maneras la elección presidencial será con el CNE”. … El objetivo de las primarias es seleccionar un líder que le pueda dar energía, guía y confianza a la oposición, para generarle presión al régimen en Venezuela.
  • “Las primarias deben ser lo más parecidas a lo que será la elección presidencial”. Eso significaría que en las primarias solo tendrían posibilidad de votar los que el régimen desee y además este puede beneficiar al candidato que más le convenga.  
  • Es mejor el conteo automático (con máquinas) que manual vs. es mejor el conteo manual que con máquinas. Ambos métodos son válidos, el problema es que en Venezuela el CNE prostituyó la votación por máquinas y ella no genera confianza en la mayoría de los opositores.
  • Sin el CNE pueden participar los candidatos inhabilitados, con el CNE no pueden participar. Si se opera bajo el CNE, solo estarán los candidatos que seleccione el régimen
  • Sin el CNE pueden votar los venezolanos en el exterior, con el CNE no pueden votar. Totalmente cierto, solo han permitido inscribir en el CNE a 100.000 votantes venezolanos en el extranjero, de un total de 4 millones o más.
  • “Incluir al CNE desestimularía al votante opositor”. Totalmente cierto también.  Ni siquiera han permitido incluir a los jóvenes en Venezuela que pasaron a la mayoría de edad.
  • El CNE se quedaría con el listado de los opositores que participaron en las primarias, y con eso podría reubicarlos a centros electorales lejanos (ya ocurrió en el pasado), o hacer una nueva “lista Tascón”. Las posibilidades están presentes.
  • “Quien vote en las primarias sin CNE, para luego NO votar en las presidenciales con CNE, no ayuda a la causa opositora, sino todo lo contrario”. El comentario es válido, pero también habrá ver que condiciones rodean a las elecciones presidenciales.

El rechazo a Maduro, el deseo de cambio, el descontento con la oposición oficial (que tiene a los partidos políticos opositores en el foso), está sirviendo para el surgimiento de uno o varios “outsiders”. Eso lo están capitalizando Benjamín Rauseo y María Corina, que es la más “outsider” de los políticos opositores al no participar del gobierno interino, ni de la negociación en México, ni tener cuotas de poder político. La intención de voto de los venezolanos, en todas las encuestas serias es la preferencia hacia María Corina como primera opción. Ella está capitalizando su posicionamiento como la antítesis de Maduro, al representar un cambio radical.

La economía y las protestas

Muchos sienten, y es una realidad, que la población venezolana está adormecida, que la gente solo se preocupa por sobrevivir y se ha olvidado de la política. Eso es cierto, pero también lo es que en las semanas recientes las protestan han aumentado en intensidad y en cobertura nacional. Se trata de protestas por las condiciones económicas de la gente. Aquí hay algo adicional muy importante que considerar, en Venezuela se ha pasado por una hiperinflación pavorosa que destruyó las condiciones económicas de las personas y produjo hasta pérdidas de peso corporal de la población. La gente buscó como sobrevivir, aun cuando el precio era vivir como zombies.

Sin embargo, el año pasado el efecto del uso del dólar, de la eliminación de los controles de precios, de una inflación relativamente controlada, de unos precios del petróleo mayores y de una estrategia de control de la devaluación hizo que mejoraran las condiciones de vida de la población. Eso creó para el venezolano, por primera vez en mucho tiempo, unas posibilidades de estabilidad y de poder pensar en el futuro. El régimen, acompañado de muchos otros, aprovechó para hacer su campaña de “Venezuela se arregló”. Definitivamente en el manejo de la propaganda son hábiles y ocurrió lo mismo que con la campaña que hicieron del Bolívar Fuerte cuando por primera vez se le quitaron los ceros a la moneda. Buena propaganda, pero el esfuerzo no es sustentable. Esta vez, le crearon expectativas a la población y la gente comenzó a respirar. El ingreso no era suficiente, pero mucho mejor que antes y había estabilidad. Hasta que después de unos meses todo el andamiaje se vino abajo. Los millones de empleados públicos y jubilados vieron desaparecer el 75% de sus ingresos en semanas. Las protestas aparecen, ya que están viendo que es imposible que el régimen mejore sus condiciones de vida

¿Qué busca la oposición oficial?

La oposición oficial, que ha pasado por múltiples denominaciones (MUD, Plataforma Unitaria, G4, G3) ha gozado del reconocimiento de los países democráticos en el mundo y ha dirigido la oposición por muchos años. Siempre vendió la imagen de unidad, pero la realidad es que siempre fue  una unidad frágil y falsa. Muchos han dudado si realmente alguna vez hubo voluntad de poder, ya que esa unidad siempre llevó a conformarse con lo que le existente, con unos pocos cargos que el régimen permitía y eventualmente el apoyo económico que se recibió de Estados Unidos. Las dificultades económicas para los líderes opositores también abrieron el campo para la penetración del régimen, y de allí aparecieron los alacranes (conocidos y encubiertos). La presión, asociada al  acceso a recursos limitados,  finalmente llevó al nacimiento del G3.

Esos partidos de la oposición oficial están extremadamente debilitados, no tienes recursos y no ofrecen soluciones y menos confianza. Las primarias presentan una posibilidad interesante para la oposición, pero no para la oposición oficial. En una elección abierta, ellos pierden al igual que el régimen. Por eso toman varias acciones:

  • Intentan que las elecciones primarias se hagan a través del CNE, allí los votantes serán pocos por desinterés de los opositores. Dentro de ese campo de acción tienen mejores posibilidades.
  • Si las primarias terminan siendo abiertas, pueden tratar de hacer fracasar el esfuerzo y apuntar a una selección por acuerdo.
  • Tratan de apuntalar a candidatos como Benjamín Rauseo, ya que no tiene una base de partidos y en caso de necesidad se pueden alcanzar acuerdos con el mismo.
  • El gran temor para ellos es María Corina, así que harán todo lo que está a su alcance para evitar que llegue. Esto lo han estado ejecutando desde hace años, pero ahora la proyección de María Corina es mucho mayor y su llegada alteraría totalmente el cuadro de liderazgo de la oposición. Si había dudas al respecto, solo hay que leer a Capriles cuando enfila contra María Corina: “El mismo cuento desde la firma del decreto de Carmona”. Mucha desesperación y temor: esas palabra parecieran provenir más bien de Diosdado Cabello.

La imagen es cortesía de DALL-E.