Para el régimen venezolano, en pocos días se ha generado extrema presión con un cúmulo de importantes hechos internacionales: (a) los casos de extradición de Alex Saab, Hugo Carvajal y la extesorera, (b) las más recientes sanciones estadounidenses al socio de Saab y Vielma Mora, entre otros, y (c) la visita del nuevo Fiscal de la CPI a Venezuela. El régimen necesita reconocimiento internacional, pero no puede operar sin represión y eso impide levantar sanciones y extradiciones. Si abandona la represión, la Cuba del 11/7/21 se quedaría enana y difícilmente podrá continuar controlando a Venezuela.   Los temas de la semana son “La visita del Fiscal de la CPI”, “Las sanciones se extienden” y “Los ruidos comunicacionales del régimen”.   

La visita del Fiscal de la CPI

La Corte Penal Internacional es un órgano de justicia internacional independiente, de carácter permanente, cuyo objetivo es asegurar que los más graves crímenes internacionales como el genocidio, los crímenes de lesa humanidad, los crímenes de guerra y los crímenes de agresión, no permanezcan impunes. La CPI es un tribunal permanente, con vocación universal, de carácter complementario respecto a las jurisdicciones nacionales. Esta jurisdicción puede ser activada por el Fiscal de la Corte, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y por los Estados Parte del Estatuto de la Corte.

El 12/8/21, el Gobierno de Venezuela rechazó las conclusiones de la exfiscal de la CPI, Fatou Bensouda, sobre el examen preliminar del caso de Venezuela, con relación a la presunta comisión de crímenes de lesa humanidad contra la población civil por parte de las autoridades. Ahora el nuevo Fiscal de la CPI, Karim A. A. Khan, inició visitas oficiales a Colombia y a Venezuela. Este fiscal trae las mejores referencias en su trayectoria legal. Existen múltiples versiones sobre los objetivos de esa visita del fiscal :  

  • El Fiscal viene a darle la oportunidad a la Fiscalía de Venezuela  para que demuestre la marcha de procesos judiciales en contra de funcionarios que cometieron las acciones de lesa humanidad. Aquí es importante entender que la CPI espera que los procesos vayan a lo más alto en la cadena de mando y que la culpabilidad no recaiga exclusivamente en el ejecutor de menor nivel de una acción. 
  • Viene para asegurarse que no se vuelva a argumentar, como lo hicieron con Besouda en el último momento, que el régimen no tuvo oportunidad de exponer su defensa en la solicitud de investigación formal y que la decisión se estaba tomando sobre la base de hechos noticiosos sin sustento.

La visita es un hito muy importante para lograr justicia en Venezuela. Es importante apuntar que también hay una serie de acusaciones de víctimas que están fuera del país, por cuanto muchas de las que están en Venezuela se encuentran amenazadas por el régimen. Aun así hubo víctimas, familiares y abogados que tuvieron la valentía de sustanciar los casos.

Las sanciones se extienden

Para Estados Unidos no ha desaparecido – y difícilmente ocurrirá en el corto plazo- la “amenaza inusual y extraordinaria” que significa Venezuela en manos de un gobierno, amigo de todos los enemigos de EEUU, con los cuales mantiene relaciones cada vez más cercanas, y cuyos grupos más radicales hacen vida en Venezuela. Venezuela en la práctica equivale a la Cuba en los 60´s y 70´s para los guerrilleros y terroristas de la época. No sorprendería que en vista de lo anterior, al haberse levantado la mesa de México, se haya agotado la oportunidad que Estados Unidos le dió a la estrategia de negociación de Borrell, y que ahora se  plantearán una nueva-vieja estrategia.

Las sanciones de Estados Unidos responden a una política de estado, con un acuerdo bipartidista, que no varía con la Administración de turno. Por supuesto, cada Presidente implementa esa política a su manera. Sigue siendo una estrategia de alta presión, ahora tratando de minimizar los daños colaterales.  Una muestra de ello es el reciente anuncio de la activación de nuevas sanciones que afectaron directamente al socio de Alex Saab, además con una recompensa de US$10 millones. Este socio es Álvaro Pulido, aun cuando su nombre real es Germán Enrique Rubio Salas. Este “adquirió” el nombre Pulido de una persona muerta, ya que como Rubio tenía condena por narcotráfico en Europa. Pulido es realmente el cerebro del negocio de Saab. Pulido es acusado de haber obtenido cerca de $1,600 millones en contratos del programa de alimentos CLAP, y de haber canalizado parte de esos fondos a través de la banca estadounidense. Según la acusación dada a conocer por la fiscalía federal del Sur de Florida, obtuvo los fabulosos contratos pagando voluminosos sobornos a las autoridades del régimen, en una red que también involucraba al ex gobernador chavista de Táchira, José Gregorio Vielma-Mora.  Este último también está siendo acusado.

La participación de Pulido y Vielma Mora en la corrupción con los CLAP ya había sido develada previamente por el Departamento del Tesoro al sancionar al empresario conjuntamente con Saab y los hijastros de Maduro. Tanto Pulido como Saab ahora también tendrán que enfrentar casos en otros países como Ecuador y Colombia.

Los ruidos comunicacionales del régimen

El régimen necesita desviar el foco de atención y concentrarla en las elecciones. Para ello, es experto en anuncios inesperados e intempestivos, algunos responden a estrategias comunicacionales exploratorias y otras apuntalan otras estrategias. Algunas de las más recientes incluyen:

  • El anuncio de una ciudad comunal en el parque nacional del Ávila, lo cual levantó el rechazo de mucho público. Es posible que este sea solo un globo de ensayo para distraer. Por supuesto, si lo quieren hacer, igual lo ejecutarán.
  • Lo asociado a la UCV sirve como ruido, pero tiene también otros objetivos. Maduro confirmó su visita nocturna a la UCV: «Parecía el antiguo retén de Catia. Estamos supervisando el arreglo de la Universidad Central de Venezuela (…) Recuperando todo, tenían abandonada a la Universidad, se había destruido todo».
  • Supuestamente asignó US$40 millones a la UCV, después de haberla ahogado financieramente por años. Nombró a Jacqueline Faría como «la protectora a la UCV», después que había prometido que dicha figura desaparecería para las elecciones de Noviembre. En paralelo el régimen descabezó a las autoridades de la Universidad Simón Bolívar (USB).
  • Todo parece formar parte del asalto final para la toma de las universidades.

La imagen es cortesía de flickr.