Mucho ruido asociado a las elecciones regionales de este mes de Noviembre. Se realizó un simulacro, muy aprovechado por el régimen para afinar sus mecanismos de control del voto, pero con poca participación de opositores. En paralelo ya está programada una próxima ronda de negociación en México iniciando el 17/10. El régimen le mostró los dientes a Borrell cuando este mencionó que la UE sería garantía para la oposición, habrá que ver en que termina la arriesgada jugada con los observadores de la UE. Los temas de la semana son “El simulacro electoral”, “El juego entre Borrell y el régimen” y “Las preocupaciones de Colombia”.

El simulacro electoral

El domingo pasado se realizó el tradicional simulacro electoral a nivel nacional y  los puntos rojos y la poca distancia social caracterizaron la  jornada. El PSUV hizo cobertura nacional, aceitando la maquinaria que les garantiza 20%-25% de los votos que con una oposición debilitada y dividida les garantizaría una victoria contundente . La oposición tuvo poca participación y en el ambiente parecen estar todavía estar más dedicados al enfrentamiento entre ellos que con el régimen. Para la oposición aprovechar las elecciones tendría que generar una “avalancha” que le moviera el piso al régimen. De lo contrario se está a riesgo de lograr que el régimen sea legitimado y aceptado como está ocurriendo con Bashar al-Assad en Siria.

El voto entubado que el CNE perfeccionó el 6 de diciembre de 2020 ahora hace casi imposible la selección de candidatos específicos para los cargos regionales y locales a elegir el 21 de noviembre, además de ocultar los nombres de los postulados detrás de sus respectivas tarjetas partidistas. Curiosamente, si los votantes opositores fueran en “avalancha” a votar en Noviembre, ese truco se les revertiría en contra, tal como ocurrió en las elecciones de la AN en Anzoátegui el año 2.015.

Ramón Muchacho comentó:

  • El “voto entubado” es una vergüenza para quienes inventaron todas esas marañas que sólo buscan cercenar aún más el derecho de los venezolanos a elegir; y vergüenza también para quienes lo defienden y promueven.
  • Vergüenza para quienes, debiendo denunciarlo y combatirlo, se hacen los locos y prefieren mirar a los lados.
  • ¿Cómo se explica que rectores del CNE aseguren que el régimen no instalará puntos rojos y demás ilegalidades en estas elecciones y, sin embargo, el régimen lo haga, incluso en el simulacro. ¿Cómo interpretarlo? El Rector Picón exhortó a los partidos a no repetir puntos de control político el 21Nov.

El juego entre Borrell y el régimen

Borrell aseguró que “la UE acompañará a la oposición porque es una mayor garantía para ellos que estemos presentes auditando el sistema”. De acuerdo a Borrell, lo que legitimará o deslegitimará al gobierno de Nicolás Maduro, será lo que diga el informe elaborado por la misión”.

A raíz de esto, el régimen de Maduro emitió un comunicado en el cual rechazó “categóricamente” las declaraciones de Borrell, y su cancillería amenazó: “Una Misión de Observación Electoral con las características descritas por el señor Borrell no será aceptada en nuestro país. La UE parece no entender su papel en el marco del proceso político venezolano, perdiendo la oportunidad de situarse como un actor respetable, imparcial e independiente, para posicionarse como una pieza política subordinada a la política exterior estadounidense, y de algunos sectores de extrema derecha, que pretenden socavar el proceso electoral.” Por su lado, el CNE calificó de «injerencistas» declaraciones sobre la Misión Electoral de la UE y el Presidente del CNE exigió disculpas públicas de Josep Borrell por sus declaraciones.

Como respuesta la “UE garantizó que su misión de observación no interferirá en las elecciones de noviembre. La misión preparada por el organismo internacional tiene como objetivo evaluar de manera independiente, neutral e imparcial en qué medida el proceso electoral respeta las obligaciones y compromisos internacionales, regionales y nacionales sobre la conducción de elecciones democráticas suscritas por Venezuela.” Curiosamente, Borrell todavía no ha reportado los resultados de la Misión Técnica que vino a Venezuela y de todos modos envió los Observadores. ¿Será factible completar el juego de prestidigitación satisfaciendo los requerimientos electorales de la UE y las exigencias del régimen venezolano?

El Financial Times reportó que “Josep Borrell ignoró los consejos de sus asesores respecto a la misión de observación electoral europea en Venezuela. La decisión (del envío) se produjo a pesar de que un equipo de funcionarios del Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE) enviado al país en julio para evaluar la viabilidad de desplegar monitores electorales advirtió que tal medida “puede ser contraria a la línea política de la UE”. «Es probable que el despliegue de una (misión) de la UE tenga un impacto adverso en la reputación y credibilidad de los observadores de la UE y legitime indirectamente el proceso electoral de Venezuela», se lee en su informe”.

Los representantes de la “oposición” aparentan estar más desesperados por las elecciones que el mismo régimen, bajo las condiciones que sea:

  • El Rector Márquez espera que declaraciones de Borrell no torpedeen la observación de la UE a las elecciones. ¿Y ese es el representante de la oposición?
  • Tomás Guanipa (PJ): «Es importante que después de 15 años, Venezuela tenga de nuevo observación internacional». El dirigente dijo que la mejora en las condiciones electorales permite a los venezolanos hacer que su voto «sea un voto de transformación y de protesta».  Los opositores intentan suavizar y justificar cualquier desvió del régimen, buscando convencer a los votantes.

Las preocupaciones de Colombia

La revista Semana reportó que el régimen de Venezuela acaba de adquirir un poderoso arsenal procedente de Irán. Venezuela no solo se está armando con misiles con la ayuda de Irán, sino también se ha especializado en el uso de drones militares para hacer labores de inteligencia en la frontera con Colombia. Hay misiles, bombas, radares y sistemas de defensa aérea. Estados Unidos, Colombia y la región están alertas. Semana reveló las pruebas de los misiles, bombas y radares que Venezuela le compró a Irán. Los documentos prueban la adquisición de 2.015 unidades de defensa antiaéreas que fueron almacenadas en los depósitos de bombas y armas aéreas en esa base militar. En total son 1.050 misiles, 400 bombas, 500 cohetes, 30 contenedores y 35 radares. Todo forma parte de la llamada Operación Escudo Bolivariano 2021.

El jefe de Estado colombiano también aseveró: “Mucho cuidado con los discursos que vienen con cantos de sirena desde la dictadura de Venezuela, y ahora salen a hablar, de manera bella, invitando a que lleguen los inversionistas, que no pretenda el dictador borrar la historia pues él fue quien expulsó a los colombianos en el año 2015″.

La imagen es cortesía de pxfuel.