En +58 Reports se busca “ser una fuente confiable para entender lo que ocurre en Venezuela” y por ello se publica semanalmente. Así hay tiempo para poder priorizar y registrar los cambiantes temas, donde muchas veces una situación explosiva que copa las noticias y el interés nacional es suplantada por otra en cuestión de días y a veces hasta de horas. Por supuesto, todo esto hay que ubicarlo y mantenerlo dentro de una visión de tiempo más larga, ya que en paralelo se están desarrollando condiciones que en el momento no hacen ruido, pero que se van acumulando y eventualmente pueden ser las determinantes. Por ello, también es conveniente con alguna frecuencia apartarse de los hechos semanales y tratar de ver el conjunto total.  En este +58 Reports haremos uno de esos ejercicios y por ello es algo más extenso.

A nivel global los regímenes autoritarios (China, Rusia, Turquía, Filipinas, Venezuela, etc.) han aprovechado la concentración del mundo en la pandemia para forzar situaciones políticas extremas. Un buen ejemplo es la decisión de China con respecto a Hong Kong y también el asalto definitivo al sistema electoral en Venezuela. De alguna manera se ha comenzado a vislumbrar la posibilidad de una II Guerra Fría, esta vez enfrentando a Estados Unidos y China. Rusia, sin tener la capacidad de ser una potencia, juega en el plano global tratando de aprovechar cualquier oportunidad para molestar a Estados Unidos. Se menciona esto, ya que más allá del enfrentamiento en el aspecto comercial y tecnológico, existen espacios de contienda global donde los grandes jugadores participan. Venezuela (conjuntamente con Irán, Corea del Norte y Siria) es uno de esos principales focos de conflicto global.

Es importante entender esta situación, ya que ello significa que lo que ocurra dentro de Venezuela puede ser fuertemente afectado por lo que haga el ámbito internacional.  Ello también implica que difícilmente se puede resolver la situación política venezolana exclusivamente desde adentro.

Internacional
Venezuela representa un problema, con diferentes aristas y pesos relativos, para los 60 países que apoyan a Guaidó:

  • Derechos humanos – esta preocupación la comparten todos y hay muchos casos en marcha, pero aquí los avances son siempre lentos.
  • Democracia – la solución electoral para la restitución de la democracia ha sido siempre propuesta en los medios diplomáticos y particularmente para la comunidad europea y los países de América Latina. Esta vía ha sido fuertemente afectada con los manejos del CNE y TSJ, y tampoco han ayudado las declaraciones del Ministro de Defensa sobre la inaceptabilidad del retorno de la oposición al poder.
  • Desplazados – La mayoría de los millones de desplazados venezolanos han llegado a los países vecinos y en volumen afectan principalmente a Colombia, Ecuador y Perú. Esos y los otros países de América Latina impactados por el Covid 19 no tienen capacidad para absorber o atender a estos. La crisis económica que viene a continuación solo empeorará la situación.  Además los pronósticos de hambruna en Venezuela, sumados a la pandemia, indican que podría haber presiones para una nueva oleada de desplazados en el futuro.
  • Generación de caos – El pasado año en las fuertes reacciones políticas que azotaron a Chile, Ecuador y Colombia se documentó la presencia en su planificación y ejecución del Foro de Sao Paulo y de elementos venezolanos.
  • Narcotráfico – Las acusaciones de narcotráfico a los principales dirigentes del régimen son una muestra de su asociación con esta actividad. Preocupación importante para Estados Unidos.
  • Terrorismo – Anteriormente era solamente la asociación con las FARC, ELN, el Foro de Sao Paolo y Hezbollah. Pero con el tiempo la alianza con Irán se ha vuelto la más importante para el régimen y se conoce la posición internacional de este país. Es la preocupación determinante para Estados Unidos, ya que el terrorismo se puede extender por la región y afectarlos en casa.

La comunidad internacional a través del tiempo ha tomado muchas acciones, algunas más efectivas que otras:

  • Estados Unidos – Tiene años creando   un entramado complejo de sanciones que han ido limitando seriamente la capacidad económica del régimen y la movilización personal y de activos de muchos de sus personeros. Hay acciones legales que han encarcelado a varios y que tienen a Alex Saab a la espera de su extradición desde Cabo Verde. Para combatir el narcotráfico están coordinando una operación  con 21 países en el Caribe y el Pacífico. La carta terrorista podría terminar siendo la determinante.
  • Unión Europea, Canadá, Suiza, Reino Unido – También han instituido una serie de sanciones y ahora hay una mayor duda con respecto a la opción de la salida electoral en Venezuela.
  • LatinoAmérica – Ha contribuido absorbiendo refugiados venezolanos y la mayoría de los países condenan públicamente al régimen venezolano. Colombia y Brasil son los más vocales en este aspecto.
  • Organismos internacionales – Hay innumerables manifestaciones de organismos condenando diferentes actividades asociadas al régimen venezolano. Sin embargo, la más activa y directa ha sido la OEA, bajo el liderazgo de Almagro.

Situación Local
Se enfrenta una realidad de pobreza donde ABC ya dice que el 96% de los venezolanos está en la pobreza y llega a niveles de África, eso es a Diciembre 2019 y ascendiendo. Todos los servicios públicos decayendo, sin ninguna posibilidad de freno o de mejora. La pandemia en expansión sin ninguna preparación desde el aspecto de la salud, pero además la imposibilidad de una cuarentena real por las condiciones económicas de la mayor parte de la población, donde ya Maduro dice que llegó a Venezuela “el brote verdadero” de COVID-19.  A la espera de las peores cosechas, Venezuela es uno de los cinco países en el mundo donde se pronostican más muertes por hambre que por Covid19.

En Venezuela para operar internacionalmente hay muy poca experiencia del lado democrático y exceso de conocimiento, capacidad y experiencia del lado socialista, comunista y Foro de Sao Paulo. Otro aspecto determinante de la incapacidad de organización de la oposición ha sido la inexistencia de un acuerdo en el diagnóstico del régimen, con posiciones que se contradicen: (a) Se enfrenta un gobierno autoritario vs un conjunto de grupos/clanes que manejan corrupción, narcotráfico y con vínculos con el terrorismo y (b) La salida es vía elecciones vs salida es a través de la aplicación de fuerza.  También está la otra realidad que los partidos del G4 han sido seriamente penetrados por el régimen y todavía se desconoce hasta que profundidad.

Desde el lado del régimen las fuentes financieras se continúan reduciendo: El presupuesto del 2020 probablemente estará en el orden de US$2.500, sumando US$500/US$1.000 millones por petróleo y US$1.500 por la economía negra. Agregando narcotráfico el total no llega más allá de US$4.000. El monto a repartir entre los favorecidos es cada vez menor. También cuenta con generar ingresos con gasolina, pero para ello necesitan poner a producir seriamente a las refinerías. Internacionalmente su aliado más cercano es Irán y tiene el apoyo verbal de Rusia.

También es relevante ver las encuestas y estas indican que la evaluación de  Maduro por su gestión ya está por debajo de 10%. En condiciones de democracia, los gobiernos no sobreviven esa medición. Por el lado de agrado, basado en el comportamiento situacional, su número está más cerca del 20%. En lo que respecta a Guaidó, quién arrancó con un agrado de >60% ha bajado a menos de 30%, y ahora ya hay otro líder que tiene un número similar a Guaidó. Esto explica el comentario de Trump, ya que Guaidó tiene Legalidad (como Presidente interino y de la AN), pero ha perdido Legitimidad.

El régimen planifica una elección de AN en Diciembre, con la participación de algunos grupos de oposición minoritarios. Sirve para distraer la atención, aun cuando el resultado no traerá legitimidad internacional. Con la situación que se vive en Venezuela, parece muy difícil convencer a la gente de oposición a una asistencia a elecciones (bajo las condiciones existentes) o incluso a una consulta popular.

Futuro
El análisis indica que el país necesita un cambio de gobierno y que la vía más realista pareciera ser la generación de presión interna apoyada por presión-acción internacional. Las condiciones para la presión interna existen y se manifiestan claramente con las 2.000 protestas sociales del 2019 y las más de 1.000 acumuladas este año, pero para poder aprovecharlas elementos de la sociedad civil y de los partidos tendrían que trabajar en ello. La primera opción debería ser Guaidó, él ha perdido fuerza y por ende legitimidad y eso dificulta su capacidad como catalizador para la movilización. Indudablemente estamos en un proceso de reacomodo de la oposición, donde el G4 debe tratar de completar su depuración. Aparecerá un nuevo liderazgo y si los partidos no son capaces de hacerlo, vendrá desde la sociedad civil.

El régimen sigue operando bajo las condiciones de extender un día más su control del poder, con crecientes limitaciones económicas y teniendo que enfrentar a futuro nuevas crisis mayores con la pandemia y el hambre.

En el aspecto internacional, las posibilidades de aceptación del régimen en el ámbito democrático son nulas. Las sanciones han sido la apuesta para forzar una salida en Venezuela y ellas se irán incrementando, particularmente desde Estados Unidos. Las elecciones presidenciales en Estados Unidos son dentro de 4 meses y las posibilidades de reelección del Presidente Trump se han complicado desde que apareció la pandemia. Por ello, Trump podría necesitar un triunfo en política internacional y Venezuela es una de las posibilidades. Tendría que apretar más todavía y quizás por ello el Presidente Trump le dijo a Telemundo: “Algo pasará con Venezuela”. Está tan al tanto de la situación local que Trump sobre Guaidó comentó: «Apoyo a quién sea que sea elegido, ahora parece ser el elegido, pero el sistema es muy malo allá, parece estar perdiendo cierto poder, queremos a alguien que tenga el apoyo de la gente. Yo apoyo a la persona que tenga el apoyo de la gente«.  Precisamente la asociación del régimen venezolano con el terrorismo puede dar pie a acciones mucho más contundentes, es necesario trabajar desde adentro.